
El verdadero miedo es como una reminiscencia de los terrores fantásticos de antaño. Un hombre que cree en los fantasmas y se imagina ver un espectro en la noche debe experimentar el miedo en todo su espantoso horror.
Yo conocí lo que es el miedo una noche de verano, al encontrarme con Javier en la calle Estrit mientras llovía. Juntos decidimos ir a ver a Agustín, en el departamento 555, pero no contestaba el timbre. Tal vez seria mejor meternos a la fuerza para asegurarnos de que no se había quedado atracado en el baño otra vez, pues un fuerte olor a pizza y salame nos empezaba a preocupar, intentamos forzar la reja pero esta no cedía, así que decidimos ir una quinta cercana y meditarlo mejor con un ron barato y aceitunas.
Luego de algunos cuantos tragos nos encontramos con un murciélago horripilante y anti-aprista que nos dijo que podíamos entrar por los tubitos verdes de afuera (mismo Mario Bros), así que le agradecimos y fuimos a probar suerte. Nos deslizamos por el tubo que nos llevo hasta un compartimiento secreto en el baño de Agustín. Una vez adentro de la casa, todo estaba oscuro, caminamos silenciosamente hasta la sala, cuando de repente sentado en el comedor vimos a nuestro amigo el Gorrión, el estaba lleno de un liquido negro resbaloso y tenia un filudo cuchillo de carnicero en la mano.
Javier: ¿Que haces acá?
El Gorrion: He venido a buscar a Agustín, pero no le he encontrado.
Fito: ¿Y que haces con ese cuchillo won?
El Gorrión: Ah! Se lo devolvía al Infeliz, me lo ha prestado para mis patatas Finlandesas.
Se le notaba la improvisación, sus ojos estaban mas desorbitados que de costumbre y tenia cara de que iba a vomitar en cualquier momento…Fue entonces cuando escuchamos un gemido horroroso, un sonido aparentemente proveniente del inframundo, tan espantoso que hasta al mismo Goku le hubieran temblado las rodillas como una niñita. Sonaba como un sapo agonizante, “grrrhhaalllfff…”.
Me acerque a la puerta de donde provenía el ruido, y me acorde que alguna vez mi abuela me había dicho que los fantasmas hablaban en ingles… así que haciendo uso de mis años de estudio en el CIDUP y de mis conocimientos de Pink Floyd me dispuse a hablar…
Fito: Hello…Is there anybody in there? Just nod if you can hear me…
Escuche unos murmullos y subiéndome bien los pantalones me dispuse a abrir la puerta… grande fue mi sorpresa cuando encontré al amigo Martinillo escondido en ese closet
Fito: Broder ¿Qué paso?
Martinillo: Webon, ¡hay que salir de acá!... los espíritus macabros y chocarreros se han apodero de este lugar…
Vi la expresión de espanto en la cara de MArtinillo y supe de inmediato que algo iba mal, voltee despacio y vi a mi gran amigo Gorrión, con los ojos desorbitados, mas grande que nunca (de estatura por si acaso) y con el cuchillo empuñado, como si estuviera a punto de apuñalarme… Yo no sabia si pedir piedad, poner en practica mis años de ver la lucha libre, o acomodarme el cabello que se me había desarreglado, y justo cuando parecía que ya todo estaba perdido, un zapatazo volador cayo sobre la cabeza del gorrión dejándolo K.O, Martinillo y yo nos incorporamos y vimos a Javier saltando en un pie (para no ensuciarse la media nueva) yendo a recoger su taba.
Javier: Puta won ¿Qué carajo ha pasado?
MArtinillo: Puta la waa es que nos habíamos reunido con Agustín el gorrión e Ignacio a jugar a la Ouija mientras comíamos pizza… pero en un momento en medio de la sesión, Agustín le robo su pedazo de pizza Giobatta a El Gorrión, y putaa, de la nada los vidrios empezaron a temblar y el Gorrión se volvió loco… luego se apagaron las luces y yo ya no se que paso por que me quede encerrado en el closet…
Después de esto fuimos a ver si podíamos reanimar al Gorrión, pero no pudimos hacer nada…parecía que el zapatazo le había dado justo en el cerebelo…
Fito: Oe y a todo esto… ¿Dónde esta Ignacio?
Martinillo: Puta no se broder…
De la nada se apagaron las luces de nuevo, un ser extrañamente alto salio de la cocina con una mascara de Jason y una cuchara sopera en la mano, todos gritamos y salimos corriendo gritando por nuestras insignificantes vidas mientras el jason de sopa nos perseguía. De la nada yo tropecé con los guantes de box de la hermana de Agustín
Javier: ¡Oh! Y ahora ¿Quién podrá ayudarlo?
Y como si fuera un milagro la casa se ilumino, y de la nada escuchamos como una ventana se rompía, la silueta de una persona apareció en la sala…y no, no era mi abuela… era un cookie…
El Cookie: ¡Yo!
Martinillo: ¡Es un cookie!
El cookie (un sujeto extremadamente grande y musculoso que usa camisas pegaditas, baila el conejito y posa mostrando sus músculos en la playa) procedió a embestir contra la criatura de la mascara derribándolo...el sujeto cayo al suelo y la mascaro salio volando, revelando la cara del infeliz…
Fito: ¿Ignacio?
Ignacio: ¡Si won! Ta que ¿no aguantan una broma? Ósea what’s up mother fucker jr.?!, oe ta que ayer me llamo la hermana de ch…
Me quede impresionado de como Ignacio tenia la facultad de hacer 80 muecas por segundo, y de cómo podía seguir hablando sus incoherencias en momentos como este…
Javier: Oe won ¿Has visto a Agustín?
Ignacio: Ta que no hermano, Si quieres que haga todo dímelo no mas, ósea recapacita un poco…
BOOOOM
…Silencio…. Todos escuchamos el golpe seco y fortísimo que venia del baño… nos acercamos cautelosamente… abrimos la puerta del baño… y luego no podíamos creer lo que veíamos…
Ahí estaba. El pobre Agustín yacía tirado a pies del inodoro, gimiendo desvanecidamente y arrastrándose, apenas le alcanzaban las fuerzas para levantar su mano hacia nosotros. ¡Mierda! Su mirada era profunda y de sufrimiento, podías vagar por todo su mundo interior, en sus pensamientos, en sus memorias. Estaba sufriendo.
Ensangrentado de cabeza y pies no lo podíamos creer. Nuestro amigo de la infancia, ¡Agustín estaba muerto!
Fito: ¡Puta madre! ¿Que paso Agustín, que rayos paso?
Agustín: ¡¡aaaaffffgggghhhhrrrllllssshhh…!!
Todos lloramos, nadie podía creer lo que había pasado, El Gorrión se recupero y se lamentaba
El Gorrión: ¡Puta Madre! ¿Qué hice?
Sin embargo, no tendríamos mucho tiempo para lamentarnos… ya que una música tenebrosa comenzó a sonar… de la nada, Agustín se levanto, peor ahora vestía un traje rojo con guantes blancos
Agustín: ¡He venido Goth al natural!
Dicho esto Thriller de Michael Jackson se escucho a todo volumen, y el murciélago anti-aprista apareció en el baño, transformándose en una versión raquítica de batman, y se puso a bailar junto a Agustín, trate de salir corriendo de ahí, pero vi que el Cookie también estaba entrando en trance y bailando, su inmensa humanidad me bloqueaba la salida
Javier: ¡Por acá won!
Voltee y vi a Javier lanzándose por el tubito verde de Mario bros, corrí lo mas rápido que pude y me deslicé, apenas mis pies tocaron la calle seguí corriendo para alejarme lo mas rápido posible junto con Martinillo, Javier e Ignacio…
Nunca olvidare ese día, en el que perdí a dos amigos míos (y un murciélago), ahora le tengo fobia a Michael Jackson y tengo un hijo adoptado. Sufro de cáncer a la vejiga y el medico me predijo una vida corta y mucha incontinencia urinaria.
El Fin.